ESTRÉS EN PANDEMIA





¿Estás estresado? Hay diversos factores en nuestra vida y entorno que pueden causar estrés; desde el trabajo, problemas económicos y de las finanzas, el tráfico y temas domésticos.


El estrés como tal es una reacción natural de la persona, ya que el cuerpo reacciona ante las presiones negativas o no que se le imponen; sin embargo, el estrés puede convertirse en un problema, cuando las presiones se vuelven abrumadoras, y en algunos casos pueden ser precursores de otros trastornos, como la ansiedad y la depresión.

Afortunadamente, el estrés puede ser manejable, y un poco de estrés, leve, puede ayudarle a desempeñarse mejor. Por ejemplo, los estudiantes ante un examen, los deportistas en una competencia, actores en una nueva presentación, los ponentes ante un nuevo tema, etc. 

Existen muchas maneras de lidiar con el estrés y simples técnicas.


¿Qué es estrés?


Existen muchas definiciones de estrés, podemos decir que es una respuesta del cuerpo a cualquier demanda que se le imponga. El estrés puede estar influenciado por factores externos e internos. Ejemplos de factores externos incluyen trabajo, relaciones y finanzas, problemas domésticos, entre otros. Por otro lado, los factores internos como la salud, el hambre, las emociones y la cantidad de sueño pueden afectar la forma en que las personas enfrentan situaciones en las que de otro modo podrían haber tratado de manera competente.

El estrés es una experiencia humana normal y puede ser útil cuando se trata de situaciones exigentes. Por ejemplo, puede ayudarnos a tener un rendimiento óptimo al pronunciar un discurso o practicar un deporte, como se ve en la curva.




¿Cuáles son los signos de estrés?
 El cuerpo se enfrenta al estrés agudo mediante la liberación de neurotransmisores que son químicos generados por el organismo, que le dicen al cuerpo que está en peligro y, por lo tanto, activa dos respuestas; de huida o de lucha. Estas respuestas son un mecanismo humano de supervivencia que prepara filogenéticamente al cuerpo para enfrentar el peligro. 


A tener en cuenta que el estrés puede afectar el funcionamiento de las personas en tres áreas; cognitiva, emocional y familiar y por lo tanto pueden afectar su productividad, su bienestar y por ende su salud mental.

Los cambios frecuentes observados durante esta respuesta incluyen de estrés son: el aumento de la frecuencia cardíaca, respiración rápida, boca seca y sudoración. Estas respuestas no tienen ningún efecto a largo plazo en el cuerpo y, a menudo, puede ayudar a lidiar con los factores estresantes. El estrés, en muchos casos, puede ser útil y ayudar a la persona a lidiar con las demandas que se le imponen, haciéndola más alerta, energizada, en sintonía y sincronía con las demandas externas.

Sin embargo, la exposición a largo plazo al estrés y la exposición del cuerpo a altos niveles de hormonales, como el cortisol y la adrenalina, pueden aumentar la vulnerabilidad de la persona a enfermedades como la depresión, la obesidad, las enfermedades cardíacas, etc.

Los síntomas del estrés pueden variar entre diferentes personas. Los síntomas más comunes son:


  • Trastorno de sueño
  • Tensión muscular
  • Irritabilidad
  • Ansiedad
  • Depresión 
  • Cansancio
  • Falta de motivación 
  • Dificultad para concentrarse
  • Cambio de hábitos alimenticios
  • Mayor uso de alcohol u otras drogas
  • Comida poco saludable y disminución del nivel







Estos síntomas, a su vez, afectan la forma en que manejas los eventos que causan estrés, lo que empeora el estrés.





¿Qué causa el estrés?


La persona es susceptible a diversas situaciones de la vida que tienen en esta época más probabilidades de predisponerla a experimentar estrés. Entre ellas, las investigaciones han encontrado que las madres que trabajaban a tiempo completo tenían los niveles de estrés más altos en las poblaciones encuestadas. Otras situaciones que pueden provocar estrés son presiones financieras, desempleo, estrés laboral, educación inferior, aislamiento social, conflictos, enfermedades personales / familiares y problemas de relación.

Las personas experimentan los eventos, estresores, de diferentes maneras. Por ejemplo, la pérdida de un trabajo puede verse como un desastre que afecta los sentimientos y el comportamiento. Alternativamente, puede verse como una oportunidad para avanzar hacia algo mejor. La manera en que se ve este evento explica las diferentes respuestas que las personas tienen al mismo evento. Otros factores como la personalidad y la experiencia previa también influyen en cómo se percibe el evento, diferencias individuales.

Otro factor es la cantidad e intensidad de factores que generan estrés; es la falta de correspondencia entre la experiencia y los recursos disponibles para enfrentarla. Perder un trabajo, por ejemplo, puede ser un evento difícil, pero si tiene dificultades con una relación además de esto, entonces es posible que no tenga el apoyo para atravesar un período difícil, emocional y financieramente.



¿Cómo te enfrentas al estrés?






Es posible aprender a manejar el estrés mediante el uso de diversas técnicas, como monitorear y supervisar la forma en que piensa sobre los eventos, técnica TCC, la respiración lenta, relajación y la resolución de sus problemas de manera estructurada. Además de este ejercicio, reducir el consumo de drogas y alcohol y hacer cosas que le gustan pueden ayudarlo a sobrellevar el estrés.






En los casos en que el estrés severo provoca ansiedad y/o depresión debes visitar a especialistas en salud mental, psicólogos y/o psiquiatras. Solo si el estado de la paciente es grave puede ser necesario su medicación como los antidepresivos pueden tener un papel que desempeñar. 


BIBLIOGRAFÍA




Responsable: Dra. María Teresa Charún Illescas 


Psicóloga, Máster en Salud y Bienestar Comunitaria, Post grado en Educación. Especialidad en clínica y educación. Estudios en Teología y Salud Pública.
Estudios en la Universidades Particular Ricardo Palma.
Universidad Nacional Mayor de San Marcos.
Universidad de Sevilla.
Universidad de Deusto.
Universidad Pompeo Fabra.
Universidad Autónoma de Barcelona – España.
Colegio de Psicólogos de Madrid - España.

Contacto: 950 986 309


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