Explorando los cambios cerebrales inducidos por la psicoterapia
Factores Cognitivos: Psicoeducación, Reestructuración Cognitiva e Insight en la Psicoterapia
En la actualidad, existe un consenso en la literatura respecto al desarrollo y fortalecimiento de habilidades cognitivas deficitarias en las personas que se someten a psicoterapias. Estas habilidades capacitan a las personas para enfrentar de manera más adecuada sus pensamientos, conductas y relaciones, brindándoles un mayor control sobre sus impulsos, la planificación de sus vidas y la toma de decisiones más saludables.
La psicoeducación, como componente fundamental de la psicoterapia, persigue dos objetivos principales. En primer lugar, busca incrementar el conocimiento seguro de la persona acerca de su trastorno mental, sus síntomas, los mecanismos implicados en el origen y perpetuación del problema, los tratamientos disponibles, la prevención de recaídas y la activación de recursos para afrontar los efectos adversos. En segundo lugar, tiene como objetivo acercar a la persona a la psicoterapia y a las estrategias disponibles para abordar los síntomas.
Por otro lado, la reestructuración cognitiva es un proceso que se basa en la corrección de percepciones e interpretaciones erróneas o distorsionadas como una forma de modificar el pensamiento y la estructura cognitiva.
En la actualidad, los avances en neuroimagen han permitido evidenciar la acción de la psicoterapia en diversos trastornos mentales. Estos estudios no invasivos han posibilitado una comprensión más precisa de los efectos de la psicoterapia en la neuroplasticidad, generando así un mayor interés en la investigación en esta área.
Las evidencias científicas sobre la acción de la psicoterapia en los trastornos mentales indican que es el tratamiento de elección o un complemento eficaz en condiciones como el trastorno obsesivo-compulsivo, trastorno de pánico, trastorno de estrés postraumático y depresión mayor.
Cerebro y terapia
En el caso del trastorno obsesivo-compulsivo, los estudios han demostrado cambios en el funcionamiento cerebral asociados a la Terapia Conductual y Cognitivo-conductual mediante resonancia magnética funcional en reposo, lo que sugiere que las psicoterapias pueden modificar el funcionamiento del cerebro.
Además, se ha observado que tanto las psicoterapias como los psicofármacos pueden influir en el funcionamiento cerebral en áreas límbicas y prefrontales en proporciones comparables.
En el caso del trastorno de estrés postraumático y especialmente en la depresión, se ha observado que las personas que se someten a psicoterapia pueden presentar alteraciones en el funcionamiento cerebral, las cuales se asocian a una mejora clínica.
La interconexión entre mente y cerebro: Evidencia de cambios neuroplásticos en el tratamiento psicológico
En la actualidad, contamos con la capacidad de observar el funcionamiento y las transformaciones que ocurren en el cerebro, lo que nos permite medir de manera objetiva los cambios que se producen durante el curso del tratamiento psicológico, así como los que pueden surgir después de la finalización de la terapia.
El cerebro, siendo un órgano plástico, se moldea como resultado de las experiencias que experimenta el individuo y responde al tratamiento psicológico a través de cambios en su estructura y funciones.
En términos generales, la investigación ha revelado que la terapia psicológica genera modificaciones en el funcionamiento cerebral que se asocian con una mejora en la sintomatología del paciente. Estos hallazgos respaldan la noción de que los cambios en la mente pueden producir cambios en el cerebro, y que el tratamiento psicológico puede tener un impacto significativo en la neuroplasticidad.
Comentarios
Publicar un comentario